Samaritano y amigo
05-06-00
Soñé que yo te llevaba en brazos;
Que con mucho amor y lágrimas lavaba tus heridas;
Que tu sed arrimaba el agua que de milagro salía de una roca fría.
Sentí que eras como mi padre, pero que a la vez, te sentía hermano;
Que además podrías ser mi amigo, pero te cuidaba como mi hijo.
En otra escena de ese mismo y tierno sueño,
Con bálsamo cubría tus heridas y en tu agonía… me sonreías.
Recuerdo que te pregunté qué más podría yo hacer,
Para así tu salud restablecer y verte sanado…
Pero tu cuerpo cansado y tus labios resecos se esforzaban por decirme algo.
Cuando la tarde caía, aun estaba yo a tu lado
Y de tu cuerpo herido, agua salía de tu costado.
Ya cuando para la tarde era tarde y la noche llegaba temprano, y casi no había luz,
Tú con premura me dijiste: "…¡ayúdame a subir, …debo morir en la cruz…!".
¡Bienvenidos a "Ejercito de Poetas"!
Sean ustedes muy bienvenidos a unirse a este pelotón de poetas, que esperamos sea un ejercito dando batalla y conociendo rincones inhóspitos de los paisajes del valle interior...
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viernes, 18 de diciembre de 2009
REY DE REYES
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