la ciudad se duerme,
y el cielo deja su paso
ahogado,
por la noche estrellada;
no quiero despertar,
y el trueno es
un rojo batir de cien palomos;
en las tardes de frió,
en que no hay sol en las hojas,
me hablan tus ojos,
y te tengo
temblando,
entre mis manos,
mi voz,mi recuerdo,
mi pluma
mi llanto!
lidia-la escriba
http://www.deloquenosehabla.blogspot.com