Voy por las laderas,
En el rincón, entre puentes
A las múltiples llagas,
A vaciar horizontes
Sólo veo ir a un puñado de ciegos
A las casas de empeño
A empeñar sus sueños
Veo allá, en una esquina,
Un cuarteto de plantas,
Plantas durmientes y cansinas
Es un turbio amanecer,
Las góndolas malditas
A parir frutos de deidades fritas
Sin pecho, sin forma,
Sin dolor ni prisa
Puntualidad de sobra,
Para llegar a ninguna parte,
Siempre a la misma hora,
Siempre intentando amarte
Veneno para ratas
Poemas que desatan
El suspirar profundo
Que me obsequia la calle
Y la muerte traicionera
Danzando en el desangrado valle
Allá has de ir tú,
Con tu andar oblicuo
Y yo sin tenerte,
Me siento pobre, me siento rico.
“Hoy serás poema” –
Dijo el hombre al fuego
“no importa cómo ni cuándo
Sólo que no sea luego.”
Tengo letras y poemas
Para regalar al mundo
Para que hagan lo que quieran
Desde el gato al vagabundo
Con un edén de nostalgia
De soledad, de bruma
De distancia
Te diré:
“Tú no sabes lo que es sufrir
Tú no sabes lo que siento
Yo no sé lo que es mentir
Cuando intento sólo miento”
Y en la estela del jardín
Nos daremos un beso,
Yo no estoy preparado
Me vuelvo mudo, sordo
Lo confieso.
[Extraído de Los versos de Fénix]
En el rincón, entre puentes
A las múltiples llagas,
A vaciar horizontes
Sólo veo ir a un puñado de ciegos
A las casas de empeño
A empeñar sus sueños
Veo allá, en una esquina,
Un cuarteto de plantas,
Plantas durmientes y cansinas
Es un turbio amanecer,
Las góndolas malditas
A parir frutos de deidades fritas
Sin pecho, sin forma,
Sin dolor ni prisa
Puntualidad de sobra,
Para llegar a ninguna parte,
Siempre a la misma hora,
Siempre intentando amarte
Veneno para ratas
Poemas que desatan
El suspirar profundo
Que me obsequia la calle
Y la muerte traicionera
Danzando en el desangrado valle
Allá has de ir tú,
Con tu andar oblicuo
Y yo sin tenerte,
Me siento pobre, me siento rico.
“Hoy serás poema” –
Dijo el hombre al fuego
“no importa cómo ni cuándo
Sólo que no sea luego.”
Tengo letras y poemas
Para regalar al mundo
Para que hagan lo que quieran
Desde el gato al vagabundo
Con un edén de nostalgia
De soledad, de bruma
De distancia
Te diré:
“Tú no sabes lo que es sufrir
Tú no sabes lo que siento
Yo no sé lo que es mentir
Cuando intento sólo miento”
Y en la estela del jardín
Nos daremos un beso,
Yo no estoy preparado
Me vuelvo mudo, sordo
Lo confieso.
[Extraído de Los versos de Fénix]